No hay nada que alivie ms que tomarse las cosas con humor. Por eso el libro Manifiesto por la Menopausia (Ed. Libros Cpula) que firma la ginecloga Jen Hunter, columnista habitual de The New York Times y conferenciante de TED, resulta, adems de formativo, muy muy entretenido y consigue borrar esa sensacin de que la menopausia es algo as como si nos hubiera llegado la fecha de caducidad.
Y tambin es muy reconfortante, porque nos recuerda algo que nunca deberamos olvidar: nuestra propia importancia. «Cuando la sociedad patriarcal nos cuenta la historia de la menopausia, nos narra un relato de juventud perdida, fragilidad y prdida de relevancia. La historia que debis recordar es la de vuestra vala, capacidad de decisin y voz propia. Quiero que tengis los conocimientos para disfrutar de una salud ptima al mismo tiempo que exigs un sitio en la mesa en condiciones de igualdad. Este es mi manifiesto», dice la autora de La Biblia de la vagina.
Si a alguien le da pereza meterse en temas de empoderamiento, feminismo o lenguaje inclusivo, no hay que temer. porque son los aspectos didcticos y prcticos los que predominan en el libro. Pero sin olvidar que precisamente la edad nos da la valenta para -como dira mi admirada Emma Thompson- mirarnos desnudas al espejo y asumir que nuestro cuerpo envejece, y no hay nada malo ni vengonzoso en esto.
Atencin mdica si o no?
Para saber si lo que te est pasando en esta etapa es «normal» o se sale de los lmites y precisa una atencin mdica hay que tener informacin y poder comparar los sntomas individuales con los de otras mujeres. El abandono mdico y social, el «no es para tanto» es un hecho. La cultura del silencio en torno a la menopausia existe, de la misma manera que existe respecto a la menstruacin. Pero la nica manera de acabar con ella es hablar abiertamente y sin vergenza. Dice Gunter que cuando llega este momento muchas mujeres tienen la sensacin de tomar una canoa y abordar un viaje ro abajo en soledad. No debe ser as.
La primera recomendacin es hacer una lista por escrito de los sntomas. Y en la conversacin con el gineclogo no centrarse tan solo en las hormonas o la necesidad de una Terapia hormonal para la menopausia (THM), porque esta es solo una pieza ms del puzle. «No hay que pasar por alto la importancia de dejar de fumar, la dieta y el ejercicio. O el valor de la terapia cognitiva conductual para los sofocos, el insomnio y la falta de libido». El objetivo es asegurar la calidad de vida.
Para tener una imagen completa no vale con analizar qu est pasando en esta etapa, afirma la dra, sino que hay que remontarse y tener en cuenta la edad, los problemas mdicos habidos a lo largo de la vida, la dieta, el ejercicio, el peso, etc. Por eso hay que estar muy seguro primero de que estamos en buenas manos.
Cuidado con los productos milagro
Hay muchos abusos de productos milagro en nombre de la menopausia y las hormonas. La dra. Gunter elabora, por ejemplo, una lista de acciones intiles y que cuestan dinero que no debera recomendarte tu mdico o proveedor sanitario:
1. Medir los niveles de hormonas en saliva: no est indicado. Es pagar por algo intil.
2. Niveles hormonales para orientar la terapia o «ver cmo ests». Estos anlisis de sangre para medir los niveles de estradiol y FSH (hormona foliculoestimulante) no estn indicados, no son necesarios para ver cmo est la menopausia.
3. Insistencia en la terapia hormonal. Tiene riesgos. Pide una segunda opinin.
4. El estrgeno no es la panacea universal. «El estrgeno en una herramienta teraputica que sirve para cosas concretas, pero si no es necesaria no tiene sentido emplearla».
5. Hormonas de formulacin magistral por encima de las farmacuticas. No han pasado controles, no estn reguladas y los estudios plantean dudas sobre su dosificacin. Esto incluye los implantes de testosterona. Nada recomendables, dice Gunter.
6. Progesterona tpica. La progesterona no se absorbe tpicamente. Abstenerse.
7. Si el proveedor es antivacunas o comulga con otras teoras de la conspiracin mdica. «Mucho cuidado. Las vacunas salvan vidas».
8. Complementos alimenticios especiales. «No hablamos de Vitamina D o Omega 3, sino de esos multavitamnicos especiales para la menopausia o brebajes para reforzar la glndula suprarrenal o los ovarios. Esas cosas no existen».
9. No aceptes consejos para la menopausia de personas que tienen tiendas on line con productos especficos para esta etapa. Las tiendas y la ciencia no deberan de mezclarse.
Las hormonas no tienen la culpa de todo
Otro de los temas del que se habla con mucha libertad y poco conocimiento son los cambios de humor que aparecen en esta etapa. La Dra. Gunter explica que los cambios hormonales sufridos en esta etapa afectan al cerebro. Pero no son responsables de todo lo que nos pasa. Y pone el ejemplo de una mujer que sali en el programa de Oprah. Mal alimentada (desayunaba pasteles y tomaba gominolas en el almuerzo), estaba adems triste porque sus hijos se haban ido a la universidad. Contaba que tom hormonas bioidnticas para afrontar este mal momento. Y se pregunta la dra. Gunter: Por qu le echa la culpa a la menopausia? Claramente aqu hay algo ms, en esa sensacin de estar cansada y desbordada. No hay que olvidar que esta es una etapa de envejecimiento que trae enfermedades asociadas. Por qu un hombre de la misma edad no culpa a sus hormonas cuando pierde las llaves o no recuerda el nombre de una pelcula? Recomienda, por tanto, tranquilizarse, pedir, si lo considera necesario, un cribado para descartar depresin, ansiedad y trastorno del sueo, plantearse si tiene estrs, hacer ejercicio y no buscar respuestas rpidas en terapias que no han sido suficientemente probadas.
Aprender a prevenir
El Manifiesto por la menopausia no sirve solo a las mujeres que ya estn en esta etapa a conocerse mejor, sino tambin a las ms jvenes para comenzar una rutina de cuidados preventivos que les permitan afrontar mejor esta etapa. biolgica, tanto en su dieta y ejercicio como desde el punto de vista mdico. Estos son los aspectos a los que hay que prestar ms atencin:
– Prdida de densidad sea, mayor es el riesgo cuanto ms temprana sea la menopausia. Una mujer que haya dejado de mensruar a los 45 o ms joven tendr un riesgo de fractura entre 1,5 y 3 vece mayor que otra que alcance la menopausia a los 50 o ms.
– Masa muscular. La reduccin progresiva de la masa muscular asociada al envejecimiento es responsable de la ralentizacin del metabolismo. Tambin est relacionada con la resistencia a la insulina. Esto induce al organismo a fabricar ms insulina, lo que provoca hambre y nos lleva a ganar peso. Crece el riesgo de padecer diabetes tipo 2. Tambin aumenta el riesgo de cadas.
– Ejercicio. Forzar los huesos a travs del peso y de la tensin muscular es importante para mantener la salud sea. Las seales mecnicas del ejercicio estimulan los osteoblastos, las clulas que construyen el hueso. Cuanto ms preparados lleguen a esta edad, mejor. Las mujeres que hacen ejercicio experimentan un declive ms lento.
– Alcohol. Hay que reducirlo.
– Fumar. Mejor si lo dejas. Afecta negativamente a la salud de los huesos de diversas maneras. Las mujeres que fuman pierden un 2 por ciento de densidad sea adicional cada diez aos despus de la menopausia.
– Perdidas de orina. Se pueden prever con ejercicios especiales para reforzar el suelo plvico.
– Vida social. Es una oportunidad para apuntalar las defensas contra la depresin, una enfermedad no necesariamente asociada a la menopausia, pero que tiene una incidencia ms elevada en esta etapa. Gunter recomienda trabajar el problema del sueo si lo hubiera, y forjar nuevas amistades.
Te puede interesar
La planificacin familiar en el Tercer Mundo: el reto de Nancy Durrell McKenna
La planificacin familiar en el Tercer Mundo: el reto de Nancy Durrell McKenna
Crédito: Enlace fuente
Discussion about this post