Un flagelo social siempre presente. Advierten que la edad de inicio es un indicador de consumo problemático. La cocaína es la droga ilegal de mayor consumo entre los pacientes de la Comunidad Terapéutica del Hospital Iturraspe, aunque de un tiempo a esta parte notan que «la gente que acude ya lo hace consumiendo más de una sustancia».
Un flagelo social siempre presente. Advierten que la edad de inicio es un indicador de consumo problemático. La cocaína es la droga ilegal de mayor consumo entre los pacientes de la Comunidad Terapéutica del Hospital Iturraspe, aunque de un tiempo a esta parte notan que «la gente que acude ya lo hace consumiendo más de una sustancia».
Por Mauricio
Argenti | LVSJ
Cada 23 de
septiembre se conmemora en todo el país el Día de la Lucha contra las
Adicciones en razón de conmemorarse en esa fecha el fallecimiento del doctor
Ricardo Gutiérrez, médico y poeta, autor de una vastísima y sentida obra
literaria, quien fuera en vida principal impulsor del Hospital de Niños que en
la actualidad lleva su nombre.
La fecha pone en
foco un flagelo social siempre presente en Argentina y en el mundo: el consumo
de drogas. San Francisco no es ajena a esta realidad, ya que estas sustancias
-tanto legales como ilegales- pueden conseguirse «a la vuelta de la esquina» y
van deteriorando la vida de cientos de jóvenes y adultos.
Desde la
Secretaria de Prevención y Asistencia de las Adicciones de la provincia alertan
que la edad de inicio es un indicador de consumo problemático. La cocaína es la
droga ilegal de mayor consumo entre los pacientes de la Comunidad Terapéutica
del Hospital Iturraspe, aunque de un tiempo a esta parte notan que «la gente
que acude ya lo hace consumiendo más de una sustancia».
En la provincia
de Córdoba existe una red de contención y abordaje de la problemática de las
adicciones a través de la Red Asistencial de las Adicciones de Córdoba (Raac)
enmarcada en el Plan Provincial de Prevención y Asistencia de las Adicciones,
lanzado por el gobernador Juan Schiaretti en diciembre de 2016.
La Raac tiene
cuatro niveles de tratamiento. El primero de ellos aborda la promoción de la
salud, la prevención del consumo de sustancias y la atención primaria en los
centros preventivos. El segundo nivel lo ofrecen los centros asistenciales,
donde se brinda un tratamiento ambulatorio especializado, multicomponente, que
cuenta con Terapia individual, Terapia familiar, Terapia grupal, Abordaje
psicofarmacológico, Terapia Familiar y Cesación Tabáquica. El nivel tres de la
RAAC se define como el nivel más intensivo de tratamiento, está representado
por aquellos establecimientos que cuenten con todos los recursos de un hospital
general de agudos o de un hospital especializado en psiquiatría, para realizar
desintoxicaciones derivadas del consumo de sustancias. Por último, el cuarto
nivel es el de máxima complejidad destinado a la rehabilitación y reinserción
de las personas con problemáticas asociadas al consumo de drogas. La provincia
cuenta con dos Comunidades Terapéuticas Públicas Profesionales ubicadas en
Santa María de Punilla y en San Francisco.
La primera de
estas Comunidades funciona desde fines de 2018, en Santa María de Punilla,
mientras que en San Francisco se inauguró la segunda Comunidad Terapéutica
Pública Profesional en marzo de 2019, en nuestra ciudad.
En este centro de
San Francisco actualmente hay 21 personas recibiendo tratamiento en
internación. Desde su inauguración han pasado por allí 406 personas siendo el
tratamiento promedio por paciente de una duración de 63 días y la edad media es
de 30 años. Cabe destacar que junto a la Comunidad Terapéutica, en nuestra
ciudad funciona un dispositivo ambulatorio que, en lo que va del año, lleva
atendido 281 pacientes entre los cuales se llevaron a cabo unas 4.500
prestaciones.
«Tras la pandemia, sabíamos que iba a crecer la
cantidad de personas que vendrían a buscar ayuda», dijo Gigena Parker.
Actualmente en el
departamento San Justo hay cerca de 12 centros terapéuticos pertenecientes a
los dos primeros niveles de la Raac que son los que se encargan de hacer
prevención y de ofrecer tratamientos ambulatorios, tanto para personas que
presentan problemas vinculados al consumo de sustancias como para sus
familiares o seres queridos.
Darío Gigena
Parker, secretario de Prevención y Asistencia de las Adicciones de la provincia
de Córdoba, aseguró a LA VOZ DE SAN JUSTO que tras la pandemia de Covid-19
desde advirtieron «un incremento en la demanda» del sistema de abordaje
interdisciplinario para el tratamiento de las adicciones.
En ese marco, el
médico psiquiatra especialista en adicciones condenó el acceso al tabaco y el
alcohol a edad temprana como los elementos que luego terminan derivando en el
consumo de sustancias más peligrosas como el caso de la marihuana y la cocaína.
LEER TAMBIÉN: «El sistema de salud se enfoca en el consumidor, pero la familia también se enferma»
-¿Qué lectura
hace en relación al momento por el que se transita en torno a las adicciones?
Estamos en un
momento que sabíamos que iba a traer un aumento en la demanda como en el resto
de los servicios de salud. Luego de la etapa más cruda de la pandemia, sabíamos
que iba a crecer la cantidad de personas que vendrían a buscar ayuda sumado al
impacto emocional y social que se reflejó en un aumento en la demanda de
nuestro servicio. Hoy la Red Asistencial de las Adicciones de Córdoba (RAAC)
está cubriendo 110 centros en distintos puntos de la provincia con dispositivos
de internación en centros de mayor complejidad del ámbito de la salud pública
como el que existe en San Francisco.
«Preocupa la edad de inicio tanto en el consumo
de alcohol como de tabaco porque ese es el indicador de mayor riesgo, más que
la droga en sí misma».
– ¿Cuál es la
sustancia que más se consume entre las personas que llegan a la Comunidad
Terapéutica?
El Observatorio
Argentino de Drogas junto con el Indec está llevado adelante la Encuesta
Nacional de Drogas y los datos estarán disponibles en mayo de 2023. Los datos
que tenemos hasta el momento nosotros, reflejan población clínica y en ese
contexto es cada vez más frecuente el policonsumo de drogas entre los jóvenes.
La gente que acude a nuestros servicios ya lo hace consumiendo más de una
sustancia. El motivo más frecuente suele ser el consumo de cocaína y sus formas
de consumo como la variante que se fuma, así como también el crack. La cocaína
fumable es mucho más adictiva y provoca un deterioro muy rápido de la persona.
-Preocupa el
consumo de cocaína. ¿Y el alcohol?
Sí. La cocaína
genera más preocupación porque las personas que la consumen de inmediato
empiezan a ver que no la manejan y tienen muchos problemas. Eso hace que tomen
conciencia del daño mucho más rápido y los lleva a pedir ayuda. En segundo
lugar el alcohol y la marihuana. En el caso del alcohol, usualmente viene
añadido al consumo de tranquilizantes pero esas personas tienden a consultar a
edad adulta.
-¿Cuál es la
puerta de entrada más directa al consumo de otras drogas llamadas «duras»?
Sin dudas que el
tabaquismo o el alcoholismo a edad temprana. Preocupa la edad de inicio tanto
en el consumo de alcohol como de tabaco porque ese es el indicador de mayor
riesgo, más que la droga en sí misma.
-¿Cuál es la edad
promedio de los jóvenes que se inician en el consumo de alcohol o tabaco?
En el caso del
alcohol los datos oficiales marcan un promedio de edad de 15,5 años. Nosotros
creemos que es 13,5 y esa edad varía de acuerdo a dónde se encuentre. Este es
un dato que preocupa porque a partir de allí comienzan a experimentar con otras
sustancias.
-¿La mayoría de
los tratamientos que se hacen en la Comunidad Terapéutica son ambulatorios o
también hay personas internadas por distintos períodos de tiempo?
Por lejos, hay
muchas más personas con tratamientos ambulatorios. De hecho, en este momento
hay 21 personas internadas y 300 con tratamientos ambulatorios.
¿Una nueva Ley de Salud Mental? Los adictos «han
sido muchas veces estigmatizados o rechazados por el sistema de salud. Es
importante poder contar con la atención de los hospitales», manifestó Gigena
Parker.
-¿Qué opina sobre
el debate en torno a cambios en la Ley de Salud Mental votada en 2010, que
dificulta las internaciones, supeditándolas a la voluntad del paciente?
En este momento
hay muchos proyectos. Uno de ellos propone separar el capítulo de las
adicciones del resto del contenido de la ley de Salud Mental. Otro pretende
modificar algunos artículos. En términos generales, la problemática de las
adicciones requiere una particularidad en su análisis. Por otro lado, es
importante rescatar el espíritu de la decisión de que la atención se realice en
hospitales polivalentes para que la persona que tiene un problema por consumo
de cocaína no esté en un lugar fuera de la atención médica general que tiene
que recibir cualquier sujeto porque han sido muchas veces estigmatizados o
rechazados por el sistema de salud. Es importante poder contar con la atención
de los hospitales y por eso la Comunidad Terapéutica pública de San Francisco
está en el predio del Hospital Iturraspe.
Además, hay cosas
que mejorar, sobre todo en lo que se refiere al presupuesto en materia de
Salud. Córdoba ha dado un paso importante en ese sentido, porque no tenía esta
red de posibilidades mientras que hoy tenemos dos comunidades terapéuticas
públicas y pronto habrá una tercera en funcionamiento. El problema crece de
manera lamentable, pero aunque esto no pasara, igualmente hay que generar
espacios de atención porque hay un enorme porcentaje de personas con adicciones
que no están en tratamiento, no consultaron. Nosotros queremos ir a buscarlos,
ofrecerles un tratamiento eficaz y llegar a los familiares para que esa
personas pidan ayuda.
Por Mauricio
Argenti | LVSJ
Cada 23 de
septiembre se conmemora en todo el país el Día de la Lucha contra las
Adicciones en razón de conmemorarse en esa fecha el fallecimiento del doctor
Ricardo Gutiérrez, médico y poeta, autor de una vastísima y sentida obra
literaria, quien fuera en vida principal impulsor del Hospital de Niños que en
la actualidad lleva su nombre.
La fecha pone en
foco un flagelo social siempre presente en Argentina y en el mundo: el consumo
de drogas. San Francisco no es ajena a esta realidad, ya que estas sustancias
-tanto legales como ilegales- pueden conseguirse «a la vuelta de la esquina» y
van deteriorando la vida de cientos de jóvenes y adultos.
Desde la
Secretaria de Prevención y Asistencia de las Adicciones de la provincia alertan
que la edad de inicio es un indicador de consumo problemático. La cocaína es la
droga ilegal de mayor consumo entre los pacientes de la Comunidad Terapéutica
del Hospital Iturraspe, aunque de un tiempo a esta parte notan que «la gente
que acude ya lo hace consumiendo más de una sustancia».
En la provincia
de Córdoba existe una red de contención y abordaje de la problemática de las
adicciones a través de la Red Asistencial de las Adicciones de Córdoba (Raac)
enmarcada en el Plan Provincial de Prevención y Asistencia de las Adicciones,
lanzado por el gobernador Juan Schiaretti en diciembre de 2016.
La Raac tiene
cuatro niveles de tratamiento. El primero de ellos aborda la promoción de la
salud, la prevención del consumo de sustancias y la atención primaria en los
centros preventivos. El segundo nivel lo ofrecen los centros asistenciales,
donde se brinda un tratamiento ambulatorio especializado, multicomponente, que
cuenta con Terapia individual, Terapia familiar, Terapia grupal, Abordaje
psicofarmacológico, Terapia Familiar y Cesación Tabáquica. El nivel tres de la
RAAC se define como el nivel más intensivo de tratamiento, está representado
por aquellos establecimientos que cuenten con todos los recursos de un hospital
general de agudos o de un hospital especializado en psiquiatría, para realizar
desintoxicaciones derivadas del consumo de sustancias. Por último, el cuarto
nivel es el de máxima complejidad destinado a la rehabilitación y reinserción
de las personas con problemáticas asociadas al consumo de drogas. La provincia
cuenta con dos Comunidades Terapéuticas Públicas Profesionales ubicadas en
Santa María de Punilla y en San Francisco.
La primera de
estas Comunidades funciona desde fines de 2018, en Santa María de Punilla,
mientras que en San Francisco se inauguró la segunda Comunidad Terapéutica
Pública Profesional en marzo de 2019, en nuestra ciudad.
En este centro de
San Francisco actualmente hay 21 personas recibiendo tratamiento en
internación. Desde su inauguración han pasado por allí 406 personas siendo el
tratamiento promedio por paciente de una duración de 63 días y la edad media es
de 30 años. Cabe destacar que junto a la Comunidad Terapéutica, en nuestra
ciudad funciona un dispositivo ambulatorio que, en lo que va del año, lleva
atendido 281 pacientes entre los cuales se llevaron a cabo unas 4.500
prestaciones.
«Tras la pandemia, sabíamos que iba a crecer la
cantidad de personas que vendrían a buscar ayuda», dijo Gigena Parker.
Actualmente en el
departamento San Justo hay cerca de 12 centros terapéuticos pertenecientes a
los dos primeros niveles de la Raac que son los que se encargan de hacer
prevención y de ofrecer tratamientos ambulatorios, tanto para personas que
presentan problemas vinculados al consumo de sustancias como para sus
familiares o seres queridos.
Darío Gigena
Parker, secretario de Prevención y Asistencia de las Adicciones de la provincia
de Córdoba, aseguró a LA VOZ DE SAN JUSTO que tras la pandemia de Covid-19
desde advirtieron «un incremento en la demanda» del sistema de abordaje
interdisciplinario para el tratamiento de las adicciones.
En ese marco, el
médico psiquiatra especialista en adicciones condenó el acceso al tabaco y el
alcohol a edad temprana como los elementos que luego terminan derivando en el
consumo de sustancias más peligrosas como el caso de la marihuana y la cocaína.
LEER TAMBIÉN: «El sistema de salud se enfoca en el consumidor, pero la familia también se enferma»
-¿Qué lectura
hace en relación al momento por el que se transita en torno a las adicciones?
Estamos en un
momento que sabíamos que iba a traer un aumento en la demanda como en el resto
de los servicios de salud. Luego de la etapa más cruda de la pandemia, sabíamos
que iba a crecer la cantidad de personas que vendrían a buscar ayuda sumado al
impacto emocional y social que se reflejó en un aumento en la demanda de
nuestro servicio. Hoy la Red Asistencial de las Adicciones de Córdoba (RAAC)
está cubriendo 110 centros en distintos puntos de la provincia con dispositivos
de internación en centros de mayor complejidad del ámbito de la salud pública
como el que existe en San Francisco.
«Preocupa la edad de inicio tanto en el consumo
de alcohol como de tabaco porque ese es el indicador de mayor riesgo, más que
la droga en sí misma».
– ¿Cuál es la
sustancia que más se consume entre las personas que llegan a la Comunidad
Terapéutica?
El Observatorio
Argentino de Drogas junto con el Indec está llevado adelante la Encuesta
Nacional de Drogas y los datos estarán disponibles en mayo de 2023. Los datos
que tenemos hasta el momento nosotros, reflejan población clínica y en ese
contexto es cada vez más frecuente el policonsumo de drogas entre los jóvenes.
La gente que acude a nuestros servicios ya lo hace consumiendo más de una
sustancia. El motivo más frecuente suele ser el consumo de cocaína y sus formas
de consumo como la variante que se fuma, así como también el crack. La cocaína
fumable es mucho más adictiva y provoca un deterioro muy rápido de la persona.
-Preocupa el
consumo de cocaína. ¿Y el alcohol?
Sí. La cocaína
genera más preocupación porque las personas que la consumen de inmediato
empiezan a ver que no la manejan y tienen muchos problemas. Eso hace que tomen
conciencia del daño mucho más rápido y los lleva a pedir ayuda. En segundo
lugar el alcohol y la marihuana. En el caso del alcohol, usualmente viene
añadido al consumo de tranquilizantes pero esas personas tienden a consultar a
edad adulta.
-¿Cuál es la
puerta de entrada más directa al consumo de otras drogas llamadas «duras»?
Sin dudas que el
tabaquismo o el alcoholismo a edad temprana. Preocupa la edad de inicio tanto
en el consumo de alcohol como de tabaco porque ese es el indicador de mayor
riesgo, más que la droga en sí misma.
-¿Cuál es la edad
promedio de los jóvenes que se inician en el consumo de alcohol o tabaco?
En el caso del
alcohol los datos oficiales marcan un promedio de edad de 15,5 años. Nosotros
creemos que es 13,5 y esa edad varía de acuerdo a dónde se encuentre. Este es
un dato que preocupa porque a partir de allí comienzan a experimentar con otras
sustancias.
-¿La mayoría de
los tratamientos que se hacen en la Comunidad Terapéutica son ambulatorios o
también hay personas internadas por distintos períodos de tiempo?
Por lejos, hay
muchas más personas con tratamientos ambulatorios. De hecho, en este momento
hay 21 personas internadas y 300 con tratamientos ambulatorios.
¿Una nueva Ley de Salud Mental? Los adictos «han
sido muchas veces estigmatizados o rechazados por el sistema de salud. Es
importante poder contar con la atención de los hospitales», manifestó Gigena
Parker.
-¿Qué opina sobre
el debate en torno a cambios en la Ley de Salud Mental votada en 2010, que
dificulta las internaciones, supeditándolas a la voluntad del paciente?
En este momento
hay muchos proyectos. Uno de ellos propone separar el capítulo de las
adicciones del resto del contenido de la ley de Salud Mental. Otro pretende
modificar algunos artículos. En términos generales, la problemática de las
adicciones requiere una particularidad en su análisis. Por otro lado, es
importante rescatar el espíritu de la decisión de que la atención se realice en
hospitales polivalentes para que la persona que tiene un problema por consumo
de cocaína no esté en un lugar fuera de la atención médica general que tiene
que recibir cualquier sujeto porque han sido muchas veces estigmatizados o
rechazados por el sistema de salud. Es importante poder contar con la atención
de los hospitales y por eso la Comunidad Terapéutica pública de San Francisco
está en el predio del Hospital Iturraspe.
Además, hay cosas
que mejorar, sobre todo en lo que se refiere al presupuesto en materia de
Salud. Córdoba ha dado un paso importante en ese sentido, porque no tenía esta
red de posibilidades mientras que hoy tenemos dos comunidades terapéuticas
públicas y pronto habrá una tercera en funcionamiento. El problema crece de
manera lamentable, pero aunque esto no pasara, igualmente hay que generar
espacios de atención porque hay un enorme porcentaje de personas con adicciones
que no están en tratamiento, no consultaron. Nosotros queremos ir a buscarlos,
ofrecerles un tratamiento eficaz y llegar a los familiares para que esa
personas pidan ayuda.
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