El anuncio sobre los nombramientos de Joselyn Chacón como Ministra de Salud y de Álvaro Ramos como presidente ejecutivo de la Caja Costarricense de Seguro Social, lo realizó este viernes el equipo de transición del próximo gobierno.
Organizaciones de trabajadores del sector salud ven con desconfianza la designación de Joselyn Chacón como Ministra de Salud y de Álvaro Ramos como presidente ejecutivo de la Caja Costarricense de Seguro Social.
El anuncio sobre los nombramientos lo realizó este viernes el equipo de transición del próximo gobierno.
Joselyn Chacón Madrigal es médica y cirujana en la Caja Costarricense de Seguro Social y es especialista en administración de hospitales. Sin embargo, según representantes del sector, es «una desconocida».
Esta tarde Chacón dio declaraciones en que afirmó que sobre distintos temas como uso de mascarillas, vacunación y la norma técnica de la interrupción terapéutica del embarazo no se van a tomar decisiones a priori sino que «tenemos que llegar y sentarnos a analizar todos los temas».
Por su parte, Álvaro Ramos es economista de y ocupó el cargo de Superintendente de Pensiones, lo que preocupa a las organizaciones pues «no conoce la institución por dentro».
Juan Carlos Durán, del Sindicato de Funcionarios Públicos y Privados de Costa Rica (Sifupcr) dijo que su organización considera que ambos nombramientos muestran una tendencia hacia la derecha. «Vemos que en general la cosa se profundiza ese populismo de derecha que marcó la campaña de don Rodrigo Chaves y su gabinete es un reflejo de eso».
Sobre la nueva ministra, dijo Durán, «hay que esperar a ver qué enfoque le va a dar al tema de la salud», pues no la conocen.
Con respecto al nombramiento de Ramos, considera que habrá una tendencia hacia la privatización de los sistemas de pensiones del país. «En términos del seguro de salud él no conoce absolutamente nada de cómo es ese mundo, los pasillos hospitalarios, las clínicas», agregó.
«Nos esperan cuatro años de oscuridad neoliberal-libertaria. A menos que no nos dejemos, lo que podría provocar una profunda crisis económica, social y política», agregó Durán.
El sindicalista detalló que en los encuentros sindicales y sociales que están previstos para finales de abril y principios de mayo se deberá definir «una agenda de lucha social que aspire a la defensa de la institucionalidad como eje central y a partir de ahí priorizar el bolsillo, la mesa y la boca de los sectores más pobres del país que appstaron a otro nuevo cambio y que exigirán trabajo decente y salarios dignos para una reactivación económica real».
Por su parte, Giovanni Ramírez, promotor de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (Anep) en la CCSS dijo que el nombramiento de Ramos es «muy extraño» porque es el primer economista que se nombra en el cargo y su única experiencia previa es en la Superintendencia de Pensiones.
«Nosotros no necesariamente coincidimos con las posiciones que él ha manifestado previamente, vamos a ver si siendo presidente ejecutivo mantiene su posición, pero además el problema es que es una persona que realmente no conoce la institución.
Ivannia Espinoza, también asesora sindical de la Anep en el Ministerio de Salud, dijo que los trabajadores con los que ha conversado sobre el tema se sienten «un poco solos» porque la nueva jerarca es «irreconocible ahí».
«Hay muchas cosas que les quedó debiendo el actual ministro y que ahora viene otra persona que no conocen, tienen temores», dijo.
A la organización le preocupan temas particulares como la Ley del Empleo Público, problemas de salud ocupacional, y «otras necesidades de los trabajadores que el actual ministro ha tenido totalmente abandonadas».
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